Frases atentas y amables que le puede decir a alguien
que está enfermo.
Septiembre
2012 | Boletin
Mensual de Salud
Es
normal que personas con problemas de salud se quejen de lo que las
personas sanas les dicen.
Puede
ser útil saber lo que se le debe decir a una persona enferma.
Las
siguientes frases en negrita son un ejemplo:
"Te
veo muy bien, pero ¿cómo te sientes realmente?"
Es difícil
para una persona enferma responder a comentarios como: "Te veo
muy bien" (o el siempre temido: "No pareces estar enfermo
"), porque sabe que usted está tratando de ser amable.
Si ella
responde con sinceridad:"Gracias, pero me siento realmente mal",
es posible que se avergüence
o piense que está siendo ingrata.
Por lo
cual será un alivio para una persona enferma responder a una
pregunta que va al meollo de la cuestión: "¿Cómo
te sientes realmente?"
"Voy
a la tienda, ¿quieres que te traiga algo?"
Esta es
una pregunta amable, atenta y útil, a diferencia de: "Llámame
si necesitas algo".
Es poco
probable que esta última pregunta sea respondida.
Es una
oferta demasiado abierta, lo que significa que no va a llamar y decir:
"¿Puedes ir a la tienda y comprarme algo de de jabón?"
Una persona
enferma que necesita ayuda no le va a pedir que vaya a ningún
lugar que usted no tenga previsto ir.
Pero si
usted le hace saber que ya tenía previsto ir a la tienda, eso
es algo completamente distinto.
De hecho,
lo más específica que sea su oferta de ayuda, mucho mejor.
Por ejemplo,
a una persona enferma le encantaría oír que uno se ofrecer
a hacerle una de esas tareas para las cuales no se siente lo suficientemente
bien como para hacerlas por si misma: por ejemplo, cambiar el aceite
al coche, lavar ropa o limpiar la nevera.
"Debe
de ser duro estar enfermo y con dolor todo el tiempo " o "
No poder moverte debe ser frustrante"
Estos comentarios
son ejemplos de "escucha activa", una técnica para
educar a un niño.
Por ejemplo,
si su hija tiene miedo a la oscuridad, en lugar de tratar de de disuadirla
de cómo se siente diciéndole: "No hay razón
para tener miedo de a la oscuridad ", o" Eres ya mayor para
tener miedo a la oscuridad ", lo que debe de decirle es algo que
retroalimente sus sentimientos: "La oscuridad te produce pánico."
Cuando
usted escucha activamente de esta manera, los niños sienten escuchados
y validados.
Esto hace
que sea más fácil para ella poder superar el miedo, porque
sabe que usted está tomando en serio su preocupación y
que está tratando de entenderla desde su punto de vista.
Las personas
que están crónicamente enfermas quieren sentirse escuchadas
y validadas.
Quieren
saber que usted comprende cómo ellas se sienten. De hecho, todo
el mundo - enfermos y no enfermos - lo que queremos sentir es que los
otros nos entienden.
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