¿Por qué algunas personas están más en
forma que otras?
Agosto
2015 | Boletin
Mensual de Salud
Cualquier
persona que empieza a correr con grupo o se apunta a una clase de
gimnasia probablemente ha notado que algunos de los participantes
están más mucho más en forma que otros pasados
unos pocos dias.
El por
que los cuerpos de algunas personas responden bien al ejercicio y otros
no es un rompecabezas para los científicos.
Un nuevo
estudio con ratones se suma al creciente cuerpo de datos sobre como
y el por que los organismos responden de manera diferente al ejercicio
fisíco.
En dicho
estudio, ratones con un conjunto particular de genes respondieron enérgicamente
al ejercicio fisíco, llegando a estar mucho más en forma
después de unas semanas de entrenamiento, mientras que los ratones
nacidos con otros genes obtuvieron poco beneficio cardiovascular del
mismo programa de ejercicios, al parecer debido a que sus músculos
del corazón no reaccionaron como se esperaba.
Los resultados
plantean preguntas acerca de si las personas que nunca consiguen estar
en una buena forma fisíco , no importa lo que hagan, tal vez
debieran reconsiderar lo que hacen.
En otro
estudio , este con humanos, estudio publicado el pasado mes de marzo,
95 hombres y mujeres entre 65 y 79 años de edad,todos con sobrepeso,
realizaron cinco meses o de entrenamiento de resistencia con pesas o
de entrenamiento aeróbico.
Al final
de ese tiempo, el 8 por ciento de los participantes en el estudio eran
más fuerte o tenian más acondicionamiento aeróbico
(dependiendo del programa que habían seguido). Pero el 13 por
ciento de los participantes que realizaron el entrenamiento aeróbico.
ni ganaron ni perdieron capacidad aeróbica, y el 30 por ciento
de los que realizaron el entrenamiento de pesas no eran más fuertes.
En el anteriormente
mencionado estudio con roedores, que fue publicado este mes en la revista
de la American College of Cardiology, por científicos de la Universidad
de Michigan en Ann Arbor y de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología
de Trondhei, dichos científicos llegaron a la conclusión
de que si los corazones no se adaptan a las exigencias del ejercicio,
entonces el entrenamiento mina los cuerpos en lugar de fortalecerlos.
La lección
potencial del estudio es que debemos vigilar de cerca la respuesta de
nuestro cuerpo cuando hacemos ejercicio.
Si después
de meses de entrenamiento, no somos capaces de correr más distancia,
tal vez es hora de cambiar la intensidad o frecuencia de los entrenamientos
o probar otra cosa, como por ejemplo el entrenamiento con pesas.
Los genes
que controlan las respuestas del cuerpo a esa actividad de pesas es
probable que sean muy diferentes de los que participan en las respuestas
a los ejercicios aeróbicos.
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